10 razones para comprar de segunda mano

Hoy en día, estamos a sólo unos clics de la entrega al día siguiente de casi cualquier cosa en el planeta. Desde comida para gatos hasta catalizadores, todo puede empaquetarse y enviarse a nuestra puerta en menos de 24 horas. Sin embargo, un gran poder adquisitivo conlleva una gran responsabilidad del comprador. En Riloop conocemos el valor que el mercado de segunda mano aporta al mundo del comercio y, en este artículo, vamos a exponer 10 razones por las que todos debemos dar un paso atrás cuando compramos online.

1. Sostenibilidad

No importa lo que busques. En casi todos los casos, lo que necesitas ya existe. Claro que hay excepciones, pero en la inmensa mayoría de los casos, si necesitas algo, otra persona ya lo tiene y no lo necesita. Las empresas fabrican productos para satisfacer la demanda. Cada vez que alguien compra algo que ya está en la cadena alimentaria, disminuye la demanda de nuevas versiones. Los nuevos productos consumen recursos y nuestros recursos son cada vez más escasos. Con el auge del transporte marítimo mundial, es muy probable que tu nuevo artilugio también consuma mucho combustible para llegar hasta aquí.

2. Coste

Salvo en el mundo de las antigüedades, comprar de segunda mano es más barato. Vamos, ¿a quién no le gusta ahorrarse unos céntimos? Utiliza los filtros de búsqueda de Riloop para encontrar en un instante las gangas de segunda mano más asequibles en todos los mercados online.

3. Revalorización

Acabamos de hablar de las antigüedades. Con el tiempo, los objetos antiguos vuelven a estar de moda. Si conservas y cuidas tus objetos más preciados, existe la posibilidad de que aumenten de valor. Un buen ejemplo son los instrumentos musicales, la ropa e incluso los coches. Así que comprar de segunda mano puede ahorrarle dinero y, a veces, incluso hacerle ganar algo.

4. Obsolescencia

Muchos productos antiguos se fabricaron para durar, mientras que las versiones más recientes se diseñaron para fallar con el tiempo. Es triste, pero cierto, que con el auge del capitalismo, las empresas se dieron cuenta de que fabricar mejores productos significaba vender menos. Así que fabricaron productos con una vida útil más corta para asegurarse de que siguiéramos comprándolos. Sin embargo, hace apenas veinte años, algunas empresas se preocupaban más por la calidad que por las ventas. Buenos ejemplos de este fenómeno son las herramientas eléctricas, los utensilios de jardinería y el calzado y la ropa.

5. Tradición

Es muy probable que tenga algo que perteneció a un amigo o a un familiar. Pasar las cosas de una generación a otra es una gran tradición que sigue vigente hoy en día. Por desgracia, estas líneas se rompen y a veces los objetos se pierden. Recoger una reliquia de alguien que no conoces y transmitirla a tu familia es una forma estupenda de mantener viva esta tradición.

6. Economía

circular Si hoy compras algo a una gran empresa, puedes estar seguro de que tu dinero saldrá de la economía local. La mayoría de las grandes empresas sacan sus beneficios del país para evadir los impuestos locales. Esto significa que hay menos impuestos para reparar carreteras, pagar hospitales y mejorar tu comunidad. Por el contrario, comprar algo a alguien local significa que el dinero se queda en la localidad. Si compras localmente, el vendedor puede gastarse unos euros en un café local, o en un taxi local, o pagar la clase de piano de su hija. Para ayudar a este propósito, Riloop te permite restringir tu búsqueda únicamente a anuncios locales.

7. Es una aventura

Es cierto, encontrar gangas locales es una forma estupenda de pasar el tiempo. No supone ningún esfuerzo teclear en una barra de búsqueda, añadir artículos a la cesta y hacer doble clic para pagar. Comprar algo de segunda mano puede ser una aventura. Puede sacarte de casa, descubrir nuevos lugares interesantes e incluso hacer nuevos amigos.

8. Vertedero

Cada artículo regalado, revendido o reciclado es un montón menos en el vertedero. Cuanto más tiempo se utiliza un artículo, más contribuye a la sociedad. Al comprar de segunda mano, no sólo consigues una ganga, sino que salvas el planeta. Adelante, eres un superhéroe.

9. Señalización

Ya hemos hablado de la demanda en el apartado de sostenibilidad, pero en realidad hay un mensaje más amplio. Cada vez que compramos segunda mano enviamos una señal. En el mundo de la inteligencia artificial y los macrodatos, podemos estar seguros de que cada clic, cada deslizamiento y todo nuestro comportamiento como consumidores se recopila y analiza. Así, cuando optamos por algo de segunda mano, las empresas toman nota y reaccionan en consecuencia. Probablemente por eso, algunos de los grandes minoristas tienen secciones de segunda mano en sus tiendas.

10. Ayudar a los demás

Comprar algo a otra persona le permite ganar algo de dinero. Son tiempos difíciles para mucha gente. Olvidando el hecho de que dar dinero a alguien hace que el dinero se quede en la localidad, a menudo es más importante ayudar a la gente local a conseguir el dinero que necesitan. Claro, algunos de nosotros podemos vender algo sólo para no sentir que hemos malgastado el dinero que gastamos en ello. Para otros, vender cosas es un salvavidas.

Ahí tienes 10 razones para elegir la segunda mano. Recuerda que estamos todos juntos en esto. Cuantas más compras de segunda mano hagamos, más cerca estaremos de resolver la crisis climática, y cada vez que lo hagamos estaremos diciendo a los hombres del dinero que queremos que cambien las cosas. Ayúdanos a difundir nuestro mensaje compartiendo este artículo en tus redes sociales.